La ignorancia es muy atrevida

Efecto Dunnin-Kruger y cómo la cagué en una conferencia en Miami por ignorante.

He leído tantas tonterías que, por ser gritadas a los cuatro vientos, se han validado como buenas que hoy he decidido echar un cable a aquellos que sí tienen algo interesante que contar y no se atreven a hacerlo.

Y, curiosamente, la pregunta número uno en el top five de cuestiones que me hacéis respecto a la marca personal es:

«Jano, ¿y yo qué cuento con mi marca personal?»

Es una pregunta tan mal formulada que te lleva directamente a chocarte contra el muro de la inacción.

Tú, querido lector, tienes mucho que contar, pero no debes formularte esa pregunta, sino, ¿qué es lo que quiero contar que mi audiencia necesita escuchar?

Y, para eso, tienes que desmenuzar el problema en tres partes muy claras:

1. ¿Qué es aquello en lo que eres excelente o te apasiona?

2. ¿A qué grupo de personas puede parecerle interesante?

3. Y, ahora sí, ¿cómo quieres contarlo?

La mayoría de nuestros problemas o miedos pierden fuerza cuando los divides en varios pequeños problemas y los vas atacando uno a uno.

Hoy vamos a desarr…